Una oración propuesta a toda la familia ignaciana

Una oración propuesta a toda la familia ignaciana

En los últimos dos años, ha surgido entre algunos miembros de la familia ignaciana, una real preocupación sobre la manera como gente joven está siendo arrastrada a un fundamentalismo violento, pervirtiendo la fe religiosa.

Hay un profundo deseo entre los jóvenes de comprometerse en una causa, con frecuencia en medio de un ambiente cultural de desilusión, desesperanza y hedonismo profundamente arraigado. El Papa Francisco ha lanzado a los jóvenes el reto de no perder la esperanza, al decir que la cosa más triste es ver a una persona joven que se ha encerrado en la desilusión.

Un aspecto importante recogido en la fórmula de los votos de los jesuitas, y otros miembros de la familia ignaciana, es "una especial dedicación a la instrucción de los niños". Tiene su origen en la concepción del Principio y Fundamento de los Ejercicios, que somos creados para alabar, hacer reverencia y servir a Cristo nuestro Señor. Se desarrolla en la llamada a la misión y servicio del Llamamiento del Rey temporal, y se valora en la Contemplación en la que vemos cómo todas las cosas provienen y retornan al Padre en y a través del trabajo de Cristo en el mundo.

Dios clemente,

Tú has colocado en el corazón de nuestra vocación

un especial cuidado de los jóvenes.

Danos, te rogamos, corazones y mentes

sintonizadas con las actuales

necesidades de hombres y mujeres jóvenes.

Llénanos con tu amor y gracia

para que podamos compartir esta plenitud.

Haznos signos de tu esperanza y tu alegría

que tanto deseas compartamos con todo el pueblo.

Que seamos capaces de alentar a la juventud

a andar los caminos de la paz, la justicia y el servicio

sin violencia y sin odio;

de modo que ellos mismos lleguen a ser fuente

de inspiración y esperanza para los demás.

Amén.

Al tiempo que buscamos nuevos caminos para compartir la inspiración y el estímulo del amor de Dios que actúa en nuestro mundo, ofrecemos esta oración a los jesuitas y a todas las familias ignacianas extendidas por el mundo.

Una oración propuesta a toda la familia ignaciana, por parte de algunos de sus miembros (Gill Goulding, C.J., John O'Brien, S.J., Edmund Lo, S.J., y Matthew Charlesworth, S.J.) en Regis College, Toronto, ON, Canada.

 Fuente: Curia Jesuita Roma